lunes, septiembre 04, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
ella se encarga de borrar cualquier señal del día anterior, a veces sólo de las horas anteriores... haciendo desaparecer cualquier signo... de tristeza, de alegría... y sólo queda la máscara, olvidada sobre la arena húmeda...
Como sueños vanos, así mis gozos ya expirados,
sin retorno ya mis días de halago,
mi amor perdido, y el capricho relegado:
sólo pena, no queda más pasado.
Raleigh, Adiós a la corte (en realitat trobat a Brooklyn Follies, de Paul Auster)
otro nudo de tipi a les 7:27 a. m.
No hay comentarios:
Publicar un comentario